La Federación de Asociaciones Gitanas de Navarra Gaz Kaló, organizó el pasado día 9 de junio en el Centro de Salud de San Adrián la I Jornada de Salud y Comunidad Gitana en el ámbito local. Jornada en la que participaron 43 profesionales del ámbito de la Salud, de los Servicios Sociales, del ámbito educativo y ONGs, de distintas localidades de Navarra.

Desde Gaz Kalo nos parecia importante convocar esta jornada con el objeto de reflexionar sobre los retos actuales de las entidades locales en el ámbito de la salud y la comunidad gitana, conocer de primera mano experiencias locales de buenas prácticas, y proponer recomendaciones para avanzar hacia estrategias locales de promoción de la salud en la población gitana.

En la presentación de la jornada contamos con la presencia de Resu Santamaría, del Programa de Promoción de la Salud de la Comunidad Gitana, del Instituto de Salud Pública y Laboral de Navarra, que nos explicó las líneas más importantes del programa y agradeció a Gaz Kaló la invitación a esta jornada.

Ricardo Hernández, coordinador de Gaz Kaló, señaló la importancia de favorecer espacios como este, donde poder participar todos/as los/as agentes que intervienen a nivel local, y apuntó que es vital que la población gitana participe en actividades que tengan que ver con la promoción de su salud. También agradeció al Centro de Salud de San Adrián su disposición para organizar esta jornada.

El desayuno saludable que ofreció la «Escuela de Madres» de la Asociación Gitana Lacho Dróm de San Adrián fue todo un éxito, y lo presentaron la agente comunitaria Esmeralda Amador y Diana Berrio.

Un lujo contar con una mesa de experiencias con Nerea Biurrun del Servicio Social de Base de Tafalla, Arantxa Erbiti del Servicio Social de Base de Alsasua, Amaia Ruiz y Flor Rey del Colegio Virgen del Soto de Caparroso, y Begoña Arbeloa del Centro de Salud de San Adrián, que nos dieron claves importantes de cómo hacer participar a la población gitana en el ámbito local.

 

 

 Javier Arza, del Departamento de Trabajo Social de la Universidad Pública de Navarra, fue el encargado de dinamizar los grupos de trabajo.

Los/as asistentes a las jornadas se dividieron en 4 grupos de trabajo para abordar el tema de la participación gitana en el ámbito local, que al final de la jornada expusieron sus conclusiones.

Javier Arza ha elaborado un documento con las principales conclusiones de la jornada, partiendo del Manual para la Promoción de la Salud en la Comunidad Gitana Equi-Sastipen-Rroma.

La educación para la salud es una de las herramientas que debe ser utilizada para la promoción de la misma. Comprende un conjunto de actuaciones que van más allá de la transmisión de información sanitaria.

En la educación para la salud se proponen intervenciones variadas y complementarias que contribuyan a:

✏ Aumentar la información y la concienciación sobre los riesgos para la salud y los métodos eficaces para reducirlos.

✏ Fomentar actitudes, creencias e intenciones positivas hacia las conductas saludables.

✏ Proporcionar recursos, habilidades personales y entrenamiento para que el individuo tome decisiones informadas y emprenda cambios que faciliten las conductas saludables y la reducción de riesgos.

✏ Ofrecer alternativas a las conductas de riesgo, que sean factibles y satisfactorias (Insúa,1999). En definitiva, se trata de desarrollar actuaciones que tengan en cuenta tres ejes complementarios:

✏ La información, o competencia cognitiva.

✏ Las actitudes, o competencias actitudinales.

✏ Las habilidades, o competencias procedimientales.

CONCLUSIONES

  1. Existen experiencias positivas de participación. Ya sean muchas o pocas, es necesario visibilizarlas, compartirlas, extenderlas:
  • Escuelas de madres gitanas, y también en algún caso de padres gitanos.
  • Actividades en asociaciones gitanas.
  • Gitanos y gitanas referentes, que están implicados en procesos participativos de la comunidad gitana, pero también de la sociedad en general: redes de coordinación, asociaciones, etc.

Visibilizar estas experiencias es positivo para la comunidad gitana, ya que puede servir como incentivo a la participación y como empoderamiento, pero también para la sociedad en general, ya que puede contrarrestar estereotipos muy consolidados.

  1. El fomento de la participación de la población gitana no es únicamente responsabilidad de la comunidad gitana sino que lo es de toda la sociedad. Cada uno, cada una, desde nuestra posición, debemos intentar hacer más cosas para facilitar la participación de los gitanos y las gitanas.

 

  1. Y es que, desgraciadamente, algunos gitanos y gitanas no se sienten parte de la sociedad; algunas personas gitanas se aproximan a la sociedad desde el miedo a sufrir rechazo.

 

  1. Por eso, no es suficiente que digamos: «aquí están los espacios para participar, que vengan, que participen». Debemos adoptar una actitud proactiva, identificando las barreras, conectando con los intereses y necesidades de los gitanos y gitanas, de aproximación «a su terreno», desde la empatía en su forma de entender y de vivir la vida, hay que buscar el alejamiento de «nuestros despachos».
  2. En ese sentido, fomentar la participación implica escucha, implica ceder protagonismo, implica respetar ritmos y decisiones. Nada que ver con considerar «marionetas» a las personas con las que trabajamos.

 

  1. El fomento de la participación debe ser realizado desde la adaptación a cada sector de población, a cada familia, a cada persona. No debemos olvidar que la comunidad gitana siempre ha sido heterogénea, pero que su diversidad se incrementa día a día.

 

  1. El fomento de la participación debe ser realizado desde la idea de proceso:
  • Se apunta que lo idóneo consiste en que se pueda iniciar a través de la participación en los propios procesos individuales (en salud, en educación, en servicios sociales), para posteriormente avanzar hacia la participación en los procesos que afectan específicamente a la comunidad gitana, culminando en la participación en procesos relacionados con la sociedad en general.